Yo me veía hasta el verano en La Jarilla para ver explotar a la huerta de vida, pero no va a poder ser… Resulta que me ha salido trabajo en mi isla y tal y como están las cosas, no he podido rechazar la oferta. Es una buena noticia seguida de una pena grande porque se han quedado muchos proyectos en el camino.
Quiero dar las gracias a la organización por todo el aprendizaje adquirido y por la comprensión de mis circunstancias. Echando la vista atrás, la experiencia ha sido sin duda enriquecedora, ¡es un voluntariado que recomiendo sin duda alguna!