Taller de curtido de pieles

Las pieles son geniales para confeccionar ropa de abrigo y pasar bien el invierno. En un contexto de autoabastecimiento, son fáciles de conseguir. A cada rato los pastores y gentes que se dedican a la ganadería sacrifican animales. En este sentido, tenía muchas ganas de aprender esta habilidad, son muchas las oportunidades qeu se abren por delante. Siempre me interesó dedicarme a la artesanía.

La parte mas dura sin duda fue el descarnado, que consiste en quitarle la piel al animal mediante una serie de cortes precisos. Después de eso es muy sencillo, se repasa la piel hasta despellejarla del todo de los trozos de carne que pudieran sobrar. Luego se limpia y se prepara para su curtido. La manera tradicional de curtir la piel es sumergirla en un agua donde previamente hayamos dejado trozos de roble o de cualquier otra corteza que tenga taninos. Se deja al remojo unos días y ya estaría curtida pero todavía tienen que ocurrir otros procesos para que ese trozo de piel se convierta en una buena chaqueta, en unos pantalones, etc.

La matanza

Por estas fechas se realiza la matanza y a los voluntarios se nos permitió participar en ella. No voy a poner imágenes del asunto pero siempre está bien conocer el origen de los alimentos que consumimos. Así los apreciamos mejor, sabiendo el esfuerzo que implican. La carne está buenísima y sin duda nos ayudará a pasar mejor este invierno que está resultando ser bastante frío. No creo que el ser humano esté arriba de la cadena pero si es cierto que necesitamos proteínas animales para una salud de calidad.

Nueva vida en la granja

No todo va a ser muerte, en la granja ha nacido un cabritillo negro. ¡El ciclo de la vida continúa! Teníamos un poco de miedo de que no pudiera tirar para adelante, la madre no parecía hacerle mucho caso al recién nacido y este se empeñaba en chupar teta de su abuela (que no tenía leche). Después de un seguimiento atento, al parecer el cabrito pilló la indirecta de que para sobrevivir tenía que mamar de una teta en concreto y no de las de otras cabras. Al final todo ha ido bien. Es monísimo, ¿a que sí?

Algo de artesanía

 

Hemos podido hacer un macetero con ramitas de olivo. El proceso para elaborar el macetero fue tedioso, teníamos que seleccionar con cuidado las ramitas mas finas y más largas, buscarlas en el olivar, contarlas y luego traerlas al albergue. Después estaba la labor de entretejer las ramas con paciencia y algo de arte. ¡El resultado quedó bastante satisfactorio!

También le hemos estado dando a la artesanía alimentaria. Me gustó aprender a hacer conserva de calabacín y el gomasio. Muy pronto las recetas en este blog.

Las navidades las pasaré en mi hogar. Estoy muy a gusto aquí pero también necesito ver a los míos… Ayer me hice una PCR en Cáceres para poder volar y por suerte dio negativo. Espero que pueda realizar el viaje inverso con normalidad, en esta nueva época «anormal» Un abrazo a todos, seguiremos informando.

 

Deja una respuesta