La rutina en el albergue
Las horas de trabajo son de 9 a 13:30 y de 17 a 19, más o menos. Como es invierno, nos adaptamos a las horas de sol. Después de desayunar juntos y de dedicar algunos minutos a centrar nuestra energía (meditar, yoga… ¡cada uno a su manera!), nos ponemos manos a la obra.
El trabajo en la granja
Es muy gratificante estar en contacto con los animales. Los animales se alimentan de lo que encuentran por ahí, no están estabulados. De esta manera, ellos son los que se encargan de preparar el terreno al abonarlo y de diseminar las semillas. En permacultura, todos los elementos se integran en el ciclo en armonía.
Pero de todas formas, de vez en cuando nosotros le damos avena y otros granos para que adquieran una fuente adicional de minerales. Así además tenemos una excusa para ver cómo se comportan, detectar enfermedades o cualquier cambio en los animales. Su conducta es reflejo de su estado interno y es importante comprobar que los bichos viven sanos y felices. Tenemos gallinas, cabras, ovejas, cerdos, dos gatos, un perro y dos burros que podrían pasar perfectamente como dos perros más. ¡Son muy cariñosos!
El trabajo en el huerto
Hasta que vine aquí, no tenía ni idea de huerta. ¿Cómo se planta? ¿Cómo se trasplanta? ¿Cuándo hay que podar? Como he llegado en invierno, nos ha tocado quitar mucha planta que se muere con las heladas (tomates, calabazas). También hemos trasplantado coliflor e incluso planté una cornicabra, un pequeño árbol que se parece a la planta del pistacho. Y de las cosas más tiernas que he hecho ha sido poner paja alrededor de las plantas de aloe vera. ¡Se ven tan monas con sus bufandas!
También ha sido divertido ponerle palos a los guisantes, para que estos puedan crecer fuertes y espigados. Me hace pensar en el cuento de jack y las habichuelas mágicas, jeje.
De todo lo que he visto hasta ahora, lo que más me ha impactado ha sido aprender que la malahierba en verdad puede ser útil para sujetar el suelo e incluso como aporte para el bancal. No es “mala hierba”, ¡sólo está mal ubicada!
IMORA nos trata de inculcar muchos conceptos de permacultura: que si el milpa, que si el bosque sintrópico, que si las líneas clave, etc. Es mucha información para asimilar, ¡pero tiempo al tiempo! Trataré de subir entradas a este blog de los conceptos que más me llamen la atención.
El olivar
Hay un olivar al que intentamos adaptar según los principios de la agricultura superior. El viejo olivar se diseñó como tantas otras plantaciones: cuadriculado, sin tener en cuenta la cantidad de horas de luz real que disponen los árboles, etc. Ahora mismo hacemos bancales para permitir que los olivos se nutran con los propios restos de la poda. Dejamos los olivos que tienen mayor posibilidad de crecer fuertes y quitamos los que están mal ubicados. Estaría bien plantar otras especies para que se desarrolle una relación sintrópica, pero eso de cara al futuro.
¡Ah! Con las ramitas más flexibles de la poda estamos intentando hacer una maceta. ¡A reciclar todo lo que se pueda!
Algo de formación
Curso de apicultura
Apenas llegué, fui a dar a un curso de apicultura tradicional. No tenía ni idea de cómo tratar a las abejas, y la verdad que son seres fascinantes. Es curioso como incluso llegan a cambiar de sexo algunas de ellas por el bien de la colmena. Me hace fantasear con la posibilidad de que algún día los humanos seamos tan implicados en nuestra comunidad como lo son las abejas (aunque no podamos cambiar de sexo)
Después del curso barajo la posibilidad de montar mi propia colmena en el futuro. No solo para poder obtener miel, sino para promover la biodiversidad. Las abejas realizan una gran labor medioambiental ya que sin ellas, algunas plantas no podrían ser polinizadas. Protegemos la cadena desde la base si cuidamos de las abejas.
Curso de formación del Cuerpo Europeo de Solidaridad (CES)
Fue interesante ponerse en contacto con otros voluntarios y sus proyectos. Tenemos pendiente visitar a un voluntariado de permacultura situado en Madrid (Valdepiélagos) en cuanto reabran las fronteras.
Mi proyecto personal
Después de observar durante este primer mes de contacto el albergue y todo lo que supone, decidí que mi proyecto personal por el momento será promocionar las redes sociales, tanto del albergue como de la organización IMORA. Es una pena que un sitio tan auténtico como el albergue La Jarilla y en el que se deposita tanto amor, no esté a reventar de clientes…
Por el momento he colaborado en la creación de nuestro producto “Bautismo rural”, que es básicamente todo lo que os acabo de describir y la verdad es que os animo a venir y probarlo. La naturaleza es generosa y devuelve con creces todo el contacto positivo que mantengas con ella.
